Exposición comisariada por el profesor Carlos Lozano. Claustro del Convento Padres Franciscanos. Consuegra, Toledo. Hasta el 31 de diciembre
15 almas es un recorrido a través de las miradas, un viaje que realizamos desde nuestro corazón hasta el corazón de esa mujer que nos mira a través de la lente, que busca nuestra complicidad, nuestra implicación. Una mirada que, en ocasiones, acusa y otras veces asusta.
15 almas puede ser un espejo que muestre nuestra peor cara, ya que nos puede hacer sentir cobardes, o espejo que nos devuelva la imagen de nuestra mejor versión, esa que se deja contagiar de determinación y fuerza. La idea de este trabajo que hoy podemos contemplar surge como un proyecto experimental dentro de la asignatura de “toma fotográfica” de los alumnos de segundo año de Técnico Superior de Imagen del CEV. Durante tres meses cada alumno/a fue realizando su propio recorrido e investigación personal, fruto del cual surgen estas quince visiones particulares que juntas componen un complejo poliedro formado por otras tantas facetas que plantean múltiples cuestiones a quienes las observamos acerca de nuestro papel social y personal respecto al problema que se plantea.
La violencia hacia las mujeres, no sólo analizada desde el maltrato físico, sino también psicológico y emocional, no es únicamente un problema de quien la sufre sino también de quienes, en ocasiones, callamos y miramos hacia otro lado, contribuyendo a normalizar actitudes y gestos que no hacen otra cosa que amparar a quien la ejerce. Una connivencia peligrosa hacia el violento y que, como sociedad, contribuye a empobrecer la calidad de nuestra convivencia.
15 almas no solo muestra la crudeza del golpe, ese que casi podemos sentir, tal y como se percibe en los geniales trabajos de Irene Polo, Naiara López, Almudena García-Mochales y Rodrigo Candía sino también la devastación psicológica y la devaluación de la autoestima que nos muestran las imágenes de Carmen Soraluce, David Ballesteros e Izabela Renata Szasz, la impactante decadencia interior que transmiten las miradas retratadas por Irene Pujante y Daniel Cambero, la desolación y soledad que inundan las fotografías de Carmen Ramos y Héctor Cudero, la perpetuación del daño infligido a las almas de los elegantes trabajos de Ana Linares y Marta Igual, El valiente planteamiento moral de la obra de Sonia Bautista, el optimismo de las duras imágenes de Soraya Torres y el claro mensaje que se extrae de las imágenes de Lucía Blázquez. Series enteras y fotografías únicas para completar una visión que pretende que salgamos de este espacio expositivo con más preguntas que respuestas, con los/as autores/as de las fotografías abriéndonos las puertas a la incómoda sala de nuestra propia moralidad y cediendo el protagonismo a esas almas que nos miran a través de la lente… y a usted, que si hoy está aquí, ya ha dado un primer paso.
Carlos Lozano
Comisariado de la exposición y profesor de fotografía del CEV
**foto: Daniel Cambero